miércoles, mayo 13, 2009

Acelerador

"Vigilad los cambios"
McFly, en Regreso al futuro

"I'm a hero
And that's how I'll make you feel
When you're riding shotgun with me
And the law is at your heels
I'm glory bound but when the chase is done
I'll take off through the mountains and have fun, fun, fun"
Johnny Cash


Desde que cumplí los 38, no he parado.

Ha debido de ser algo de realidad fuerte sobre el paso del tiempo y no he parado.

Viajes a Valencia, Tarragona, Asturias, Soria y la sensación de NON-STOP. La boda de Oscar que fue genial. Me encanta Asturias. Y la salve marinera. Otro tema para cuando mi funeral.

Cuando pienso que debo parar y reflexionar, la vida me enseña una lección y me acelera.

En estos días he hecho de todo. He montado en bici por Madrid, me he cortado el pelo (para alegría de todos, se acabo la época ye-ye) y me he dado al G3.

Hace unos meses monté una cata de vino con compañeros del curre frente a mi casa. Nos lo pasamos muy bien y algunos nos fuimos al terranova a rematar la jugada. Hubo tres que fueron en la misma moto de Pacheco (d.e.p) a Terranova.

Lamentable acto que no fue sino el presagio de un peligro total. Tres tíos con poca materia gris y mucha materia de todos los colores por todos los poros. Unidos por los barriletes, un mítico del barrio que nos tiene encandilados, hemos hecho de todo. El núcleo duro. Lo más chuflas de mi trabajo: el G3

Decidir que nos íbamos a Málaga el mismo viernes después de ahogar/compartir las penas (de uno de nosotros) en alcohol, llamar a medio Madrid para tomar y tomar, conocer a Joana, ver partidos de fútbol como si estuviéramos en el campo.

Una de las cosas que he hecho es enamorarme otra vez. Esta vez de Cudillero (No es un jugador del Osasuna... Me siguen encantando la sonrisa y la mirada de una mujer). Es un pueblo que hay que ver. Está al lado de uno que se llama El Pito (donde dormimos). Nunca había dormido en un pito. Qué experiencia.

A veces la vida se acelera y el blog se queda un poco abandonado. Pero lo tengo aquí (señalando mi cabeza con ambos índices de los pies).

Hoy tengo un recuerdo para Antonio Vega, que ha sido tanto para todos los que nacimos cerca del 70. Es un ejemplo claro de artista bohemio. Se ha quedado a medio camino entre ser una leyenda joven y un viejo rockero.

Hay que saber pisar el acelerador. O sabes o no sabes.

Las drogas son una mierda. El ron sí que es bueno. Y Johnny Cash.

Y tú que estás leyendo estas líneas.

Un abrazo,

Cacheche.

PS: Nunca pierdas la fe. Ni las llaves de casa.

PS: Antonio, te dedico esta canción. Allá donde estés. Al final te has librado de la cárcel de las drogas. Los congresistas no entienden a los rockeros.

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